A quien sienta que no puede salir de
una situación difícil, le pregunto:
¿Es justo considerar que alguien
tenga el poder de causar dolor en otra persona?
¿Es justo que una persona sienta que
el mundo se acaba, que no tiene esperanzas, que sienta que la vida no tiene
sentido y que solo existan motivos para llorar? ¿Que no hay en su vida un lugar
para la alegría, la fe y la esperanza?
¿Has pensado alguna vez que tienes
derecho a ser feliz? ¿Has sentido miedo de ser feliz?
¿Por qué? ¿Por qué no aprendes a ver
la vida con otro cristal? ¿Acaso no eres una persona? ¿Acaso no crees que
tienes el mismo derecho que los demás a verte bien, a progresar, a trabajar, a
ser independiente, a crecer, cultivar tu mente y tu espíritu?
Ahora yo te digo, todo eso es
posible, tú puedes transformar tu vida, pero debes desearlo y tomar coraje, sin
miedo, si alguien te hace daño debe temer que lo expongas, entonces debes
exponerlo. Debes ser valiente con ese primer paso comienza un nuevo capítulo en
tu vida, si callas, permites que el cobarde siga atemorizándote.
No es fácil, lo sé, pero cuando das
el primer paso, eso te impulsa y te da valor para continuar. No permitas que te
intimiden. Debes tener en cuenta esto: eres fuerte, si soportas
las agresiones es porque hay fortaleza en ti, pero dale un giro y úsala para
ser libre, para superarte, busca ayuda, siempre hay alguien que te la brindará.
Yo te digo que cuando logras algo por pequeño que parezca es algo grande y te
da satisfacción, se te llena el corazón de felicidad y quieres sentirte así
todos los días.
¿Acaso no quieres eso? ¿No te parece
que es posible? Busca en tu interior, búscate y verás que no vale la pena
ocultarte, muéstrate y busca, mírate y verás lo que vales, tus cualidades, tus
virtudes, tienes capacidades que tal vez no descubriste, anímate y explota todo
lo que puedes hacer, tienes mucho para dar. Entonces, dar ese paso es el paso
definitivo, el paso liberador, el paso a la felicidad.